Bienvenido de nuevo a... DATOS CURIOSOS
Por Ben Singer, auxiliar de pares de SCAN
El diccionario define la recreación como “una actividad que se realiza para disfrutar cuando uno no está trabajando”. Pero, ¿qué sucede cuando el “disfrute” desaparece? Tres miembros de SCAN en California comparten sus puntos de vista sobre cómo manejaron sus desafíos recreativos impulsados por la COVID-19.
“Crecí en Maine,” comenta Ted O., miembro de SCAN desde hace 11 años, de Dana Point. “Mi padre tenía una embarcación a motor y solía ir al lago Sebago. Ahí empezó mi amor por las aguas abiertas”
.En California, Ted se unió al club náutico local para compartir su entusiasmo por la navegación. Pero cuando llegó la COVID, el club adoptó protocolos de seguridad, lo que significó que Ted tenía menos tiempo para estar en su barco. Afortunadamente, cuando la COVID mejoró, Ted tomó una decisión que dio sus frutos: Este hombre de 76 años se ofreció como director del programa de navegación junior del club.
“Enseñamos a los niños las habilidades de toda una vida”, comenta. “Navegar requiere un enfoque diferente: estar más atento al viento, a la posición del barco o, como tripulante, responder a las órdenes del timonel con eficacia. También me mantiene físicamente ágil y requiere esa ‘concentración relajada’ de la que hablan los deportistas. Un día de carreras, o simplemente de navegación recreativa, te hace apreciar el hecho de estar en el agua”
.
Henry K., 74 años, de La Mirada, también sintió las limitaciones de la COVID. “Cuando llegó, nuestros nietos se mudaron con nosotros. Mi mujer y yo cocinábamos mucho más en casa porque teníamos que hacerlo”, comenta. “Hicimos nuevos platos coreanos que aprendimos en YouTube. Todos ayudaban. Eso nos unió más y fue positivo”
.Sin embargo, cuando los campos de golf cerraron, Henry empezó a echar de menos el golf y los amigos. “Pero ahora volví a jugar. Ya no echo de menos a mis amigos; lo que realmente echo de menos es mi swing”, comenta riendo. Ahora que todos están vacunados, Henry se reúne con tres compañeros de SCAN para jugar al golf mensualmente y hacer un conteo del hoyo 19. “Hablamos de los golpes realizados o fallados, la mayoría fallados. Esa es la parte divertida. Se alegra de volver al campo y espera mejorar su juego.
Patti D., 70 años, es miembro de SCAN desde hace cinco años. Se mudó a California desde Ohio hace 40 años para disfrutar del sol. En 1984, puso en marcha “WallyWorld ’84”, una reunión de familiares y amigos que ha cobrado vida propia.
Hoy en día, desde recién nacidos hasta personas de 92 años se reúnen en Mission Bay en los 83 puntos de autocaravanas reservados para el evento. “Hay actividades para los niños y un concurso de cocina con chile. Y, por supuesto, está la hermosa playa”, comenta Patti.
¿Cómo influyó la COVID en este evento? “En 2020, tuvimos 20 familias que, como es lógico, se retiraron, pero otras 22 ocuparon su lugar”, afirma. “Limitamos las actividades grupales. No hubo abrazos; solo abrazos de aire. Respetamos la seguridad de los demás y nos distanciamos socialmente. Usábamos mascarillas. Estábamos al aire libre y respetábamos todas las medidas de seguridad”. Como resultado, Patti informa que no hubo casos de COVID-19. El evento de este año tuvo lugar a principios de octubre y se agotaron las entradas.
¿Qué efecto ha tenido la COVID en la recreación de estos miembros? Todos aprecian las lecciones aprendidas. Se vacunaron y siguen practicando el distanciamiento social y usando mascarillas cuando es necesario. Lo más importante es que aceptaron el cambio, lo que les ayudó a adaptarse cuando fue necesario. Hoy están agradecidos por haber recuperado el tiempo para la diversión, la familia y los amigos, viejos y nuevos.
Dato curioso: Henry y sus compañeros de golf son todos auxiliares de pares de SCAN que hablan con regularidad con nuestros miembros. Foto superior central: Henry con Jerry P. y Ben Singer, quien también escribió este artículo.
Vea los videos de Ted, Henry y Patti en scanhealthplan.com/welcome-back.